Las apuestas también son tremendamente adictivas. En algunos lugares de España se celebran peleas clandestinas de gallos para conseguir grandes cantidades de dinero. Está totalmente prohibido apostar en estos combates y solo está permitida la entrada a personas federadas. Sin embargo un equipo de 'Diario de' asiste como público sin que nadie les pida ninguna acreditación.

Tampoco se quedan fuera de esta adicción los famosos. Ben Affleck, Brad Pitt, Michael Douglas o Leonardo Di Caprio, entre otros, son algunos de los actores fascinados por el poker. Es tal la obsesión, que muchos de ellos han contratado instructores para perfeccionar su técnica. En España, Mercedes Milá entrevista a Marisa Medina, ex-presentadora de televisión, que confiesa haber sido adicta a la cocaína y al juego. Completamente rehabilitada, cuenta cómo ambos elementos formaban una mezcla explosiva que se desarrollaba con total libertad en lugares ocultos al margen de la ley.

Conociendo todo esto, Mercedes Milá acude a la Comisión Nacional del Juego para entrevistar a algún responsable que explique la razón por la que los adictos a las máquinas tragaperras no pueden autoprohibirse la entrada. También les pregunta por qué están al alcance de cualquiera y el Estado no se preocupa en restringir el acceso a la máquinas, algo que ya se hace con los bingos.