Escrito el: 30 de Mayo de 2007 a las 01:18

Por si puede ayudar a alguien os voy a contar un poco de mi historia:

EL PRINCIPIO

Con 10 años comencé a jugar con dinero, que hurtaba a mi madre, en las timbas que se formaban en la plaza de mi pueblo. Se pintaban unos cuadros con yesones en el suelo. Una persona hacia de banca y cobraba las pesetas que caían fuera del cuadro, y pagaba doble o triple según el valor de los cuadros, hasta siete veces y media si atinaba a caer en un pequeño círculo que se encontraba en el centro de la pintura. También jugaba con cromos y con canicas, siempre acompañados por ciertas cantidades de dinero, para darle más aliciente. Con 14 años comencé el juego de cartas, tute, subastado, truque, y más adelante julepe, jilé y bacarrá. Comenzaba la forja de un jugador.

LA TRAMA

Nunca dejé de jugar a las cartas de la baraja, y mientras aparecieron las tragaperras y a su vez comenzó mi afición a ellas. Fueron evolucionando en mecanismos y aumento de precio, y a su vez yo iba gastando más progresivamente. Un día probé, como no podía ser de otra manera en un enganchado, a ir a un bingo, y por ende también me enganché. Fue pasando el tiempo y, entre mis estudios primero y mi trabajo después, se intercalaba una vida de pensamiento único: conseguir dinero para jugar y jugar para obtener dinero, que a su vez sería jugado de nuevo, la pescadilla que se muerde la cola. Me casé, tuve hijos y, cómo no, seguí jugando. A pesar de obtener buenos ingresos por mis trabajos siempre andabamos a la última pregunta, el juego se comía la mayor parte de ellos.

EL COMIENZO DEL FIN

Allá por el año 1999 la situación se empezaba a complicar en demasía. Comenzaba ya a jugar más de lo que ganaba. Por suerte o desgracia cobré una herencia, la cuál creí que me sacaría de mis problemas. Lejos de ser así, la situación se agravó. Me la fundí en menos de 3 años. En los 5 últimos años la situación se ha hecho tan insostenible y he tocado tanto fondo que en bastantes ocasiones he decidido quitarme la vida, cosa que por suerte no he hecho. Jugar ya no ha sido divertido, y nunca lo será para mí.

EL DESENLACE

Hace aproximadamente 3 meses vi un rayo de luz. Me puse a reflexionar, tranquila y serenamente que necesidad tenía yo de seguir así, cuál sería el desenlace final de la situación en caso de seguir con ella, una mujer sin esposo, unos hijos sin padre y un esposo y padre en un psiquiátrico, en la carcel o sirviendo de abono a los cipreses. Sopesé los beneficios que me reportaría abandonar mi vida anterior. Evalué todas las posibilidades, tanto afectivas como económicas que me reportaría cambiar la situación, simplemente a cambio de un sacrificio, dejar de jugar a todo. Y así lo hice. Hoy, ya no supone tal sacrificio, simplemente no me atrae nada el juego, puedo jurarlo. Si alguna vez paso a un bar a tomar un café, veo las máquinas como otros muebles cualesquiera pertenecientes a la decoración del local.

Hoy soy un hombre nuevo. Tengo que agradecer muchísimo a mi mujer que me ha brindado siempre todo su apoyo y comprensión tanto en su fase de codependiente involuntaria, como ahora en el proceso de mi rehabilitación. En otro momento os contaré el contenido de algunas de nuestras charlas, seguro que os ayudará.

Un fuerte abrazo para todas y todos:

Alonso

Escrito el: 30 de Mayo de 2007 a las 05:32

Gracias Alonso gente asi como tu y con estas expresiones ayudan mucho pero que mucho en el foro.

Yo estoy en proceso de recuperacion y abstencion, estoy entre caida y recaidas. HOY  al leer tu mensaje a estas horas que estoy trabajando y que a lo mejor al sali y tomar un cafe me picaria el gusanillo digo NO NO estas 24 y mañana a por otras 24 horas sin jugar.

Gracias alonso gente asi como tu hace falta aqui, alla y en todo el mundo

¡¡Que Dios te bendiga amigo ¿¿ y no es una frase echa, sino qu entendo esa luz que viste venia del más allá, llamemosle Dios.

Un saludo campeon

Escrito el: 30 de Mayo de 2007 a las 06:02

Alonso admiro a las personas que como lo haces dan de si en beneficio de los demas de forma desinteresada. Este, tu comentario a todos nos da animo en nuestro día a día. Es dificil expresar un sentimiento y tu lo has logrado.

Un abrazo.

Escrito el: 30 de Mayo de 2007 a las 07:55

Bien Alonso !!!

Es un mensaje ejemplar y digno de tomar en cuenta para seguirlo. Sigue adelante con mas fuerza.

Que Dios te bendiga

Escrito el: 31 de Mayo de 2007 a las 17:33

Jaime compañero, sin acritud y sin ánimo de polemizar te pregunto:

Después de controlar tu adicción por el juego ¿no es posible que lo hayas sustituido por darnos la coña con tus "premisas"?

Un abrazo

Escrito el: 01 de Junio de  2007 a las 02:06

Supongo que cada uno de nosotros juega o jugó por motivos diferentes, la mayoría de las veces sin saber cuáles son esos motivos. No podemos asegurar a ciencia cierta que jugamos (en pretérito o en presente) por uno o varios motivos, pues cada cual tendrá su razón (o sinrazón) para hacerlo o haberlo hecho. En el fondo, lo importante debe ser, que sea cual sea la razón o razones por la o las que se juega o se jugó, se busquen las contrarias para dejar de hacerlo.

Jaime, dices que tu razón se basa en que el juego se realiza única y exclusivamente por la intención de ganar dinero, aunque equivocadamente porque en el juego nunca se gana. Pues bien, llevas tu parte de razón, y así buscas la "contrarazón": "No jugaré porque siempre perderé". Bien hecho, un camino de abstención.

Xavier, dices que tu razón se basa en que jugamos porque nos gusta jugar, y pones el ejemplo de que a una máquina que aunque diera caramelos en lugar de dinero también jugarías. Pues bien, llevas tu parte de razón, y así buscas la "contrarazón": "No jugaré, porque mi fuerza de voluntad está por encima de las ansias de jugar que me produce mi enfermedad". Bien hecho, un camino de abstención.

Con esto no quiero ser diplomático, al decir que los dos tenéis razón, sino que la razón que cada uno tenga si sirve para que el juego siga en paro, bienvenidas sean esas razones.

Y para no ser menos que vosotros yo también me voy a pronunciar en mis razones, las que tuve para jugar: Han sido siempre cuestiones de hábito, de malos hábitos, de cobardía, de querer evadirme de los problemas en lugar de decidirme a resolver aquellos que estuvieran en mi mano y tener serenidad ante aquellos ante los cuales yo nada pudiera haber hecho. Y por supuesto, algunos de esos problemas eran económicos y otros no lo eran.

Andres, Mario y Christian, buscad vuestras razónes para dejar el juego, seguro que las encontráis. Si yo estoy pudiendo, seguro que vosotros también podéis. Cada vez que deis un paso hacia el juego pensad que vais a dar un paso hacia atrás. No merece la pena que seáis esclavos de una adición que sólo os reporta perjuicios. Dejad de jugar y a la larga veréis cuántos beneficios encontráis. Mucho animo.

Amigo y Álvaro, seguid dando vuestros consejos que los necesitamos aquí.

Gracias a todos:

Alonso