Escrito el: 07 de Julio de  2006 a las 13:37

hola, soy nueva. Yo no tengo vuestro problema, es mi pareja la que lo tiene.

Hemos empezado con la ayuda de psicólogos pero él no se lo toma en serio. Hace 3 días eran las máquinas y ayer fue el bingo. Dice que con el bingo no tiene problemas que lo que tiene que dejar son las máquinas. Pero ¿es normal que un día entre semana después de trabajar, en vez de ir a su casa se vaya al bingo?

 Y yo estoy cansada de la frase "lo siento". Quiero ayudarlo pero se cree autosuficiente. Y a mi me va a volver loca. No puedo dormir, no puedo centrarme en las cosas, no paro de llorar...Al final la que va a necesitar ayuda voy a ser yo. Y no se con quien desahogarme porque si me ve llorar o le digo que estoy de los nervios y que creo que tengo ansiedad se enfada conmigo diciendome que es lo que le estoy contando, que de que tengo yo ansiedad. Que yo no tengo ningún problema. Ayer estuve a punto de coger las maletas e irme porque esto no es vida.

Pienso que debe tener algún problema más o igual soy yo. No se. De su problema, no se como lo hace, acaba dandole la vuelta a la tortilla y discutir de otra cosa.

La verdad es que el escribir me desahoga un poco.

Gracias por "leerme"

Escrito el: 07 de Julio de  2006 a las 13:42

yo estoy igual que tu,

me da todo mucho miedo. pero tambien me da miedo perderle, estoy igual de perdida que tu, no puedo ayudarte pero pero si escucharte,

pienso que lo unico que nmos queda es ser fuerte y no perder nunca la esperanza.

Escrito el: 07 de Julio de  2006 a las 13:50

Leeros los mensajes del foro. Un ludópata intentará manipularte hasta la saciedad para poder seguir jugando.

O les parais los pies por las malas, o aceptan que se les paren por la buenas.

Todo el tiempo que paseis junto a un ludópata que no tiene interés en curarse en serio, será en detrimento vuestro. Os van a exprimir, a engañar, a culpar de todo, a darle la vuelta a todo para que parezca que estais mal de la cabeza, os van incluso a robar, os van a crear dependencia de ellos, y la lista es más larga en función del grado de ludopatía y los medios de los que disponga la familia.

Tomad una decisión antes de caer enfermas.

Escrito el: 07 de Julio de  2006 a las 14:05

Solo puedo deciros que P.V.A tiene toda la razon del mundo, vosotras no teneis que hundiros y ponerles las cosas bien claras, por que ellos hasta que no ven tocar fondo no reaccionan y habeces hasta tocando fondo no quieren aceptarlo y acaban hundiendose.

No hundiros con ellos si ellos no quieren salir de esto vosotras no podreis hacer nada y con forme valla pasando el tiempo cada vez sera peor para vosotras, tomad una decision y enfrentaros a ellos puniendoselo claro todo, es la unica solucion.

Un saludo

Escrito el: 07 de Julio de  2006 a las 17:18

Yo también soy ludópata, la única diferencia con las parejas de valmur y Diela es que he reconocido mi problema y estoy tomando las acciones necesarias para corregirlo, por el momento voy bien, llevo 68 días sin jugar, aunque debo decir que me llevó bastante tiempo (años)llegar a entender que tenía una conducta autodestructiva y que debía cambiar; la ludopatía es una enfermedad más fuerte que la voluntad de la persona, por eso es difícil corregirla.  P.V.A. tiene razón, una de las formas de ayudar a un ludópata es hacerle entender por las buenas o por las malas que debe tratarse la adicción que tiene, les recomendaría a valmur y Diela que les digan a sus compañeros que entren al foro y lean, tal vez esto les pueda abrir los ojos, hasta pronto.

Escrito el: 08 de Julio de  2006 a las 01:42

el bingo no es el problema, somos nosotros, jugadores patológicos, el problema, que tiene una solución: no jugar. Un día, cinco moneditas, a esto sí a esto no, zarandajas, nuestra mente enferma termina, tarde o temprano, en una espiral de juego compulsivo, irrefrenable porque estamos enfermos y sólo nos para la falta de gasolina; y el combustible lo sacamos de dónde podemos y cómo podemos, llevándonos para adelante a hijos,nietos, primos, madres, padres, parejas, cuentas, huchita del cerdito del niño, lata de moneditas de la abuela, alcancia del viaje de estudios de la hija, cuenta, tarjeta, venta, ...

Leí en la Biblia de un ludópata un consejo que he visto puesto en práctica y resulta efectivo:

Amaos un poquillo, y olvidaos de nosotros, jugadores que no queremos tratamiento.

Como señala Prisca en otro hilo, hay que hacernos ver y comprender nuestra enfermedad, serenamente, ayudarnos a tomar conciencia de la gravedad de esta adicción, de que no nos vais a facilitar más dinero, de que no tenemos ya ni crédito ni credibilidad, cortarnos en pedacitos las tarjetas, ...