Escrito el: 24 de Diciembre de 2007 a las 16:36

El 3 de Septiembre decidí formar parte en una Asociación para la Rehabilitación de Jugadores de Azar, y fue mi hermano la persona a la que le conté mi problema y no dudo ni un instante en ser mi familiar de apoyo y acompañarme todos los lunes a las terapias para enfermos y familiares.

Desde el primer momento tuve muy claro que quería salir de ese mundo que a punto estaba de anularme como persona y desde entonces hice caso a todo lo que me dijeron en la asociación, tanto el psicólogo, los enfermos y familiares y mi rehabilitación va por el camino correcto, ya que incluso personas que desconocen mi problema me han dicho que me encuentran mejor aspecto, que soy más amable con ellos y que he vuelto a ser la persona de hace muchos años y esta es la señal inequívoca de que las cosas se están haciendo bien, asi que nada más deciros que a mí la loteria me tocó el 3 de Septiembre de 2007 y además sin jugar obtuve el mayor premio al que podría aspirar: Volver a ser persona otra vez, en todos los aspectos.

Espero administrar este premio el resto de mi vida ya que es lo único que da sentido a la vida de los enfermos como yo: El no jugar.

A partir del día que decidí ir a la asociación comenzó el resto de mi vida, ahora FELIZ  vida y espero que siga así muchos años, ánimo a todos, tanto familiares como enfermos.

La vida bien vivida es el único juego donde siempre se gana.

Escrito el: 24 de Diciembre de 2007 a las 19:09

Estoy de acuerdo contigoen casi todo dejar de jugar te recupera como persona que yo pienso que la mayoria de jugadores tenemos un defecto, no miramos a los problemas de cara, pero solemos tener bastantes virtudes, como que solemos ser como casi todos los obsesivos personas constantes y tenaces que si nos lo proponemos y tratamos de olvidar el juego nos puede ir muy bien en la vida porque ademas somos buenas personas y eso la vida siempre lo devueve, yo pienso asi.

Por tanto lo importante es recuperarse para la vida real e intentar pensar lo menos posible en jugar.

Este pensamiento nos anula para la vida al ser obsesivo, pero dejar de jugar no es facil porque es juego forma parte de nuestra vida y de nuestra personalidad y siempre lo echaremos de menos porque nos gusta jugar.

Pero no podemos jugar nos anula para la vida real.