Escrito el: 17 de Julio de 2008 a las 10:53
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Hola juan antonio:
¿que te voy a contar que ya no sepas? entiendo perfectamente tu caso, pues me ha pasado mil veces en estos ultimos 30 años (realmente 20, en los diez primeros ni me plantee el dejar de jugar mas que muy ocasionalmente)
Las he tenido de todos los colores y de todos los estilos, desde cambiar de juego a ver si a otro podia jugar normalmente, hasta la de por una moneda o un dia no pasa nada, pasando, como no, por aquella en que de repente te encuentras jugando y no tienes ni puñetera idea de porque lo has hecho.
al final lo que me está funcionando es asumir plenamente el hecho de que no hay medias tintas con el juego, de que requiere de un esfuerzo total. He acudido a una asociacion y acudo puntualmente y con ilusion y ganas a ella, he aplicado las medidas preventivas plenamente y ademas me he sincerado con todo aquel que pudiera tener alguna relacion con el mismo, tanto para que no me dejen dinero como para que me sea un problema el jugar, tambien aplico una regla a rajatabla y es no mentir, engañar o guardar silencio aunque solo sea por que eso me puede hacer volver a viejos habitos de conducta muy habituales en los jugadores.
Aun asi no tengo el pleno convencimiento de que resolveré el problema pero es que ademas no quiero tenerlo, prefiero seguir dia a dia e ir recogiendo los frutos de mi abstinencia y de ese cambio de actitud ante las cosas, y de momento me va muy bien (veremos en el futuro)
Parece que tienes claro que no te puedes relajar con esta enfermedad y que tienes que aplicar las medidas que nos ayudan asi que solo te puedo decir que animo y que adelante, que si ya lo conseguiste seis meses, puedes volver a hacerlo y al menos esta vez seguro que te confias un poco menos.
Y por Dios, huye de pensar que el juego puede ser una salida a un problema puntual (sobre todo economico) porque si esta vez hubieras ganado lo suficiente para pagar esa factura... panico me da el pensar en lo que hubiera significado. Cuando recaemos y perdemos, al menos estan frescas en nuestra mente las cosas que hemos aprendido en esos meses y recuperamos mas o menos rapido, pero cuando recaemos y ganamos... olvidamos todo, volvemos al principio , reforzamos la creencia de que puede haber una solución jugando, etc, etc, volvemos al pozo con peor situacion por el desgaste que los nuestros ya han sufrido y entonces... que dios nos pille confesados.
el juego nunca es la salida, eso tenemos que grabarnoslo con fuego en el cerebro. un saludo, animo y fuerza y felices 24 horas.
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